El Ocojal es un conjunto residencial ubicado en el bosque de Rancho Avándaro, compuesto por seis casas de 350 m² cada una, desplantadas sobre un terreno de más de 7,000 m².
Cada casa fue pensada para familias con dos a cuatro hijos, con un estilo de vida enfocado en la convivencia y el disfrute de la naturaleza.

El proyecto se concibió con la intención de intervenir lo menos posible el entorno, respetando la vegetación existente y realizando una tala mínima de solo tres árboles, logrando así una integración armónica con el paisaje. Para resolver la gestión del agua en temporada de lluvias, se diseñaron soluciones constructivas para mantener el terreno permeable.

La integración no solo se da a través de la disposición de las viviendas, sino también mediante el uso de materiales como madera local y tejas de barro conformando una paleta cromática en sintonía con las tonalidades del contexto.

La morfología en “A” aporta una sensación de amplitud, con espacios de doble altura y grandes ventanales que enmarcan el paisaje y establecen una conexión visual directa con la naturaleza.

La orientación de cada vivienda fue cuidadosamente estudiada para favorecer el confort climático junto con diversas estrategias pasivas de control térmico, sistemas de ahorro de agua y plantas de tratamiento.